La "fuga" es una estructura formal que se basa en el desarrollo de una idea embrionaria que genera la mayor parte de la composición. Tiene la peculiaridad de poder generar sentimientos de una gran unidad y coherencia, de tal manera, que las características del material generador se expanden por toda la pieza.
Fue muy apreciada en la época barroca y utilizada como un recurso formal básico por los compositores clásicos, románticos y neoclásicos. Las fugas más conocidas son las de J.S. Bach, y especialmente su "Toccata y Fuga" en Re menor BWV 565, aunque la mayoría de compositores barrocos importantes compusieron fugas memorables. Actualmente no es muy apreciada por los compositores "contemporáneos", mientras que los "neoclásicos" sí que la valoran.
Personalmente, encuentro muy interesante y gratificante el proceso creativo de una fuga, en el que se puede observar como crece el sentimiento generador inicial y se va ramificando hasta cristalizar en la pieza. Las fugas que aquí presento fueron compuestas en el 2001, tras varios años de experimentación, y forman parte de un proceso muy amplio de toma de conciencia de las posibilidades expresivas de la modalidad menor natural, y de intentar extraer (si eso es posible) nuevas posibilidades al modo menor. Todas ellas son exclusivamente a dos voces y rítmicamente van explorando estructuras rítmicas muy elementales. En general, el tempo va creciendo desde la fuga nº 1 hastas llegar a la última, y van aumentando en intensidad. Todas ellas son similares en cuanto a la organización interna del material y fusionan la "forma sonata" con la "fuga tradicional". El sentimiento general es triste y melancólico.
Fuga nº 1:
Fuga nº 2:
Fuga nº 3:
Fuga nº 4:
Fuga nº 5:
Fuga nº 6:
Fuga nº 7:
Fuga nº 8:
Fuga nº 9:
Fuga nº 10:
Fuga nº 11:
Fuga nº 12:
Las dos "invenciones" surgiron de mi admiración por las famosas invenciones de J.S. Bach.
Invención nº 1
Invención nº 2:
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